febrero 7, 2018

Responsabilidad

Gildan recibe la Distinción de bronce en el Anuario de Sostenibilidad 2018 de RobecoSAM

Gildan ha sido incluida en el Anuario de Sostenibilidad RobeccoSAM 2018 por sexto año consecutivo. Este año, la Compañía recibió la distinción de Bronce. El Anuario de Sostenibilidad de RobecoSAM es una de las publicaciones más completas del mundo en el ámbito de la sostenibilidad  corporativa. El índice se elaboró con una selección de criterios que captan de la mejor manera la calidad de la gestión de una empresa y su potencial para crear valor a largo plazo.

"Estamos orgullosos de ser nuevamente parte del Anuario de RobecoSAM en la categoría: Industria de textiles, prendas de vestir y productos de lujo, ya que con el paso de los años la inclusión en el índice se vuelve más difícil y solo se selecciona al 15 % de las mejores empresas de cada industria", indicó Claudia Sandoval, Vice Presidenta de Ciudadanía Corporativa de Gildan.

"Felicito a Gildan Activewear de todo corazón por haber recibido una calificación de Bronce en el Anuario de Sostenibilidad 2018.  Las compañías incluidas en el Anuario son las empresas más sostenibles del mundo en la industria y que avanzan en temas sociales, medioambientales y de gobierno corporativo de manera que nos ayudarán a materializar los Objetivo de desarrollo sostenible de las Naciones Unidas para el 2030", señaló Aria Prepoudix, Directora Ejecutiva de RobecoSAM.

Todos los años desde el 2004, el Anuario de Sostenibilidad ha enumerado las compañías más sostenibles del mundo en cada industria según su puntuación en Evaluación de sostenibilidad empresarial anual (CSA) de RobecoSAM.  En el 2017, RobecoSAM evaluó a 2,479 empresas en 60 industrias que cumplían con los siguientes objetivos: prácticas innovadoras de sostenibilidad empresarial que lideran con el ejemplo y un enfoque en los conductores de crecimiento a largo plazo.

El desafío clave destacado en el Anuario de Sostenibilidad para la categoría de textiles, prendas de vestir y artículos de lujo es el intenso escrutinio de las partes interesadas que enfrentan estas empresas, pues demandan más transparencia en todos los niveles de las operaciones de la empresa. En respuesta a los consumidores más exigentes, las empresas deben integrar consideraciones sociales y medioambientales en todo el proceso del ciclo de vida, desde el diseño del producto en el inicio del proceso hasta el reciclaje de los artículos utilizados al final de la vida útil de los productos.